La sesión que más ha durado
Kano
Como sesión única, recuerdo una partida que jugamos al Señor de los Anillos (MERP) que duró desde las 8 de la mañana, hora en la que se abrió el local de la asociación de rol de la UPV, hasta las 9 de la noche, momento en el que cerramos porque no podíamos quedarnos por la noche. De hecho, no paramos ni para comer, pues durante un combate, uno de los personajes que no participaba fue a por bocatas a la cafetería, y de vez en cuando alguien se acercaba a comprar papas y similares. Sano total.
Como sesiones a varios juegos, hubo una época en la que, todavía todos en el nido familiar, cuando nos encontrábamos con la posibilidad de quedarnos solos en casa durante los fines de semana, aprovechábamos para estar jugando toda la noche del sábado. Esto significaba que por la mañana, o por la tarde del sábado, quedábamos a jugar hasta que el cuerpo aguantase.
La mayor salvajada fue una fiesta que comenzó el viernes, saliendo de fiesta y llegando tarde… muy tarde. Esa misma mañana nos levantamos temprano (los que se acostaron) y fuimos a jugar un partido en la liga del instituto (los que jugaban), para luego ir a casa a ducharnos, y comenzar la primera de las sesiones a eso de las doce. Y encadenar una partida tras otra hasta las once de la mañana siguiente. 23 horas seguidas jugando al rol, parando únicamente para comer y cenar, tras dormir poco más de 3 horas (los que durmieron) del día anterior.
Nostamal.
Tiberio
Quince años… una casa rural… creo que encadenamos 16 horas o así, parando únicamente un ratito para hacer la comida.
Puedes ver más respuestas a esta pregunta leyendo al resto de los participantes del Desafío de los 30 días.
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