El viernes pasado, al no tener partida y tampoco planes, quedé con un amigo a jugar a una partida del Lords or Waterdeep, juego que un amigo misterioso me regaló estas Navidades, y al que le agradezco mucho este hecho. Mucho.
En estas lides, tengo poca experiencia en hacer reseñas de juegos de mesa, así que si me lo permitís, voy a ir un poco a mi aire. El juego, por lo que he estado mirando, es un eurogame camuflado, publicado por Wizards of the Coast en su linea de juegos de mesa, y que esta ambientado en la ciudad de Aguasprofundas. (Si alguien quiere saber más de eurogames, que mire este enlace, o que se pase por la BSK y pregunte 🙂 )
Esta es la portada de la caja del juego.
Pero esto no sale dentro.
El juego consta de lo siguiente. Tu, como jugador, eres uno de los Señores de Aguasprofundas. ¿Os acordáis de aquellos que manejaban en la ciudad desde la barrera, utilizando facciones y realizando movimientos para conseguir sus planes? Si habéis jugado alguna vez en Forgotten Realms, seguramente os habréis tropezado con ellos o con sus planes en alguna ocasion.
Bueno, pues el juego trata de eso. Eres uno de los Lords de Waterdeep, y tienes que conseguir llevarte el gato al agua, consiguiendo más puntos que el resto de los Lords participantes. Para conseguir puntos, a lo largo de cada uno de los ocho turnos, tienes que trabajar con tus agentes, enviándolos a las distintas partes de la ciudad para que puedan ser tu mano en los entresijos de la misma, consiguiendo edificios, aventureros que trabajen para ti, enlazando intrigas que afecten al resto de los Lords o te favorezcan, y apuñala… haciendo amigos, entre otras. Y, por otro lado, con los aventureros que tus agentes van consiguiendo, tienes que ir realizando una serie de quests que te interesan para conseguir más puntos, más aventureros, más monedicas de oro… vamos, más cosas.
Tu ves cubitos.
Yo veo al gremio de los ladrones haciendo una reunión no autorizada.
El tema de gestionar los agentes no están nada mal. Como en este tipo de juegos, nunca tienes los suficientes para hacer todo lo que te gustaría. Y entre que no tienes suficientes agentes, y que el resto de los jugadores te van quitando opciones, al final te desespera un poco la situación. Necesitas aventureros, y pasta, y quests que resolver, y acuchillar por la espalda, y… y… y… argh!! ¡Que difícil es hacer complots!
Pero el tema de resolver quests me tiene totalmente enganchado. Es decir, en principio es una parte muy simple del juego. Tienes una serie de quests (o aventuras) que coges de una pila, y para conseguir dicha aventura, has de contratar a los aventureros necesarios que se te indican, que pueden ser tan pocos como tres (el típico grupito de guerrero, mago, pícaro y «para-que-vamos-a-necesitar-a-un-clerigo») o tantos como muchos. Con nueve guerreros y dos pícaros me tuve que lanzar yo a una… se ve que lo del clérigo no lo veían claro, y enviaban más guerreros de sustitutos…)
– Oye, ¿por qué no enviamos a un guerrero-clérigo-pícaro-mago a esta?
– Nah, si está chupá. Mete a dos guerreros y dos pícaros, que los clérigos y los magos son caros.
– Pero es que no creo que vayan a salir, que es chunga.
– Mete más guerreros.
– Pero es que…
– MAS-GUE-RRE-ROS.
Como he dicho, esta parte es muy sencilla. Tu metes los recursos que necesitas para conseguir el quest, y recibes la recompensa. Es algo directo por lo que no hay que hacer nada más, y sin embargo, es de las partes más divertidas dentro del juego, sobretodo para roleros como nosotros. Ves que las acciones que realizas acompañan a una historia, y puedes dejarte llevar, interpretando lo sucedido, hablando de las grandes hazañas que consiguieron los aventureros a los que enviaste con el objetivo de alcanzar tus planes. De esas gestas de las que se hablarán en el futuro sobre ellos.
Gestas, gestas y más gestas se cuecen ahí
Pero bueno, dejemos las filias para otro momento. No todo es perfecto en el juego. Al principio, tiene dos handicaps bastante chungos relacionados entre si. El primero, que están en inglés. Si eres ducho en el idioma, no pasa nada. E incluso si eres insistente como yo, tampoco. Pero el juego es bastante dependiente del idioma, así que si hay alguien que vaya a jugar y que no se defienda con él, lo va a tener difícil para jugar sin ralentizar en exceso el juego. Y el segundo, que las reglas son extensas. Vale, quizá no serán demasiado complicadas si ya estas acostumbrado a este tipo de juegos, y rápidamente te harás con ellas, pero si eres novato en esto de los eurogames, es posible que al principio veas todo como un mogollón.
El segundo problema lo puedes solucionar fácilmente jugando una partida tu solo, viendo las mecánicas y haciéndote con ellas. El primer problema es más complicado, y pasa por aprender ingles o utilizar alguna de las tradumaquetaciones que hay por ahí, que al final lo único que hacen es estropear un poco el conjunto.
Sin embargo, si logras superar estos dos escollos, es un juego totalmente recomendable para roleros a los que les gusten las ambientaciones fantásticas medievales, Forgotten Realms en particular, y no les importe pensar un rato.
PD… ah, para los interesados. Hay una expansión, Scoundrels of Skullport, que tiene buena pinta. Y para aquellos que se quejan de que no ven aventureros, sino cubitos, siempre pueden por un poquillo de pasta, pedir unos meeples aquí con una forma más adecuada. Además, en la BSK (mencionada anteriormente) de vez en cuando hacen pedidos conjuntos para abaratar gastos.
PD2. Algunas imágenes de este post están cogidas de la BGG.
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